¿Qué es?
Antes de nada, aclarar que el Ayuno Intermitente no es una dieta sino un método nutricional que no cambia qué comes sino cómo lo haces, es decir se basa en períodos de ayuno y períodos de ingestión. Este pequeño cambio en nuestra forma de alimentarnos es muy beneficiosa en muchos aspectos como veremos en el siguiente párrafo, entre ellos para nuestra salud.
Los tipos principales de este método de alimentación son tres: el ayuno 16/8, ayuno 24 y ayuno 48 que difieren entre ellos en el número de horas de ayuno o de ingestión. El primer modelo, el 16/8 es el más fácil de los tres, y consiste en un período de ayuno de 16 horas frente a otro de ingestión de 8 horas; de este modo realizaríamos las primera comida del día a las 14:00h y podríamos comer hasta las 22:00 y desde esta hora hasta las 14:00 del día siguiente realizaríamos el período de ayuno. Las opciones de 24 y 48 consisten en períodos de ayuno de 24 y 48 horas respectivamente, y el cuerpo, por si nos surge a la duda, se adapta sin problema a estos períodos de ayuno más largos.
¿Qué beneficios tiene?
El Ayuno Intermitente es muy beneficioso para el organismo en diferentes aspectos y además, nos puede servir tanto para adelgazar como para ganar músculo.Para adelgazar, es recomendable porque al limitar nuestras comidas en menos dosis en las que ingeriríamos las kilocalorías que nos correspondan, quedaremos más saciados . Sin embargo, para ganar músculo también es aconsejable, simplemente subiendo el número de kilocalorías en nuestros períodos de ingestión.
En cuanto a la forma en que benefician a nuestro organismo, nos sorprenderá cómo este sencillo cambio, puede ser tan positivo, partiendo del más obvio, que es mejorar nuestra capacidad de autocontrol. Además,reduce el envejecimiento y retrasa la mortalidad, disminuye los indicadores de inflamación, de hecho incluso restringe el crecimiento de las células cancerígenas. Reduce el colesterol de nuestro cuerpo y los triglicéridos y nos ayuda a retener las masa magra mientras la grasa se pierde. También tiene efectos positivos para el funcionamiento de nuestro cerebro y la plasticidad neuronal.
¿ Cómo aplicarlo?
Es importante cumplir con un requisito antes de empezar con el Ayuno Intermitente, y este es que nuestra alimentación sea equilibrada y saludable. También es aconsejable limitar nuestras comidas a tres para que nos resulte más fácil empezar con el método. A continuación os aconsejamos que poco vayáis reduciendo las calorías del desayuno para conseguir dar el salto hacia el ayuno de 16 horas con menos dificultad. Si seguimos estos sencillos pasos, iremos adaptando el cuerpo al método del Ayuno Intermitente y de ahí, al ayuno de 24 horas lo tendremos mucho más fácil.
