Sé que ha llegado la primavera y que es época de flores, pero todavía con los resquicios de frío que nos quedan, vamos a despedir el invierno a lo grande y de la mejor forma que sabemos: con un reportaje de lujo con sabor a nieve.
Y si alguna de vosotras ya tiene fecha para la temporada que viene, este es vuestro post, pues hay inspiración para rato.
Hace nada quiso compartir conmigo Click10, un gran equipo de fotografía que pisan fuerte y con las que me siento totalmente identificada por su estilo, buen hacer y naturalidad en las fotos, una espectacular sesión de novias en la nieve que me recordó que los grandes del mundo nupcial siguen siéndolo por muchas razones y en estas fotos podréis entender a lo que me refiero.
Click10 organizó este reportaje en la nieve de la mano de Flamintgo, una nueva marca dirigida por Cartu Calderón de Aguinaga -sinónimo de estilo y profesionalidad- que debes conocer sí o sí si estás pensando en organizar una boda o cualquier otro tipo de evento. Y a las fotos me remito.
Navascués, por su parte, vuelve a hacerme soñar con una novia dispuesta a enfrentarse al frío con el mejor de los estilos, con cuidados detalles de confección y con un diseño, en definitiva, que pone en valor todos sus años de experiencia.
Me encanta esta novia despeinada en mitad del campo de Finca Prados Riveros, dejando a un lado el protocolo nupcial con el pelo suelto y a lo loco, pero a la vez muy estudiado y natural gracias al arte de Cheska.
Como compañeras de camino, unas damas ideales con faldas vaporosas de Bon Point y botas de Ganzito Shoes. Y como complementos geniales propuestas en forma de modernos tocados calentitos, al estilo piloto de avión de Mimoki, o motero de sombrereros Solideo, para acompañar a la novia donde haga falta.
Siempre me ha gustado darle un toque de color a la vida, y por supuesto a cualquier boda. Por eso me encanta este ramo de Aquilea seleccionado para el reportaje donde el amarillo resalta sobre el blanco pulcro que reflejan paisaje y protagonistas.
Me gusta mucho que los pajes también sientan el protagonismo con flores para el gran día, porque siempre es época de soñar, pero cuando eres niña (y no tan niña) la ilusión es el motor de casi todo.
El invierno dejó hace tiempo de ser una época de transición, para convertirse en dueño indiscutible de bodas espectaculares y este reportaje es muestra de ello.
Gracias Click 10, por compartirlo conmigo.
Un besote enorme, Ana.
