Patones de Arriba en otoño

Un plan fácil e improvisado. A menudo son los mejores. Estábamos desayunando y convencí a mi familia para salir de casa e ir a tomar el aperitivo a algún lugar bonito de la Sierra. Hacía años que no visitábamos Patones de Arriba así que pensamos que era un buen día para volver. Se me había olvidado lo bonito que es. Y más en esta época. Patones de arriba en otoño es una maravilla. Esta estación le sienta tan bien…

El municipio de Patones está en el norte oriental de la Comunidad Autónoma, cerca de la provincia de Guadalajara, a unos 60 km de la capital. El pueblo se halla a 832 m sobre el nivel del mar y es un municipio tan pequeño y con encanto que recorrerlo sin prisa es el mejor plan.

Lo más pintoresco de este sitio  son sus casas de “arquitectura negra”. Es una técnica empleada tradicionalmente en algunas zonas españolas como la sierra de Ayllón, entre Guadalajara, Segovia y Madrid y este es el último pueblo de Madrid que la conserva. En otoño todas las casas y calles están llenas de hojas y los colores ocres y rojizos lo invaden todo.

Pasear por sus calles es un disfrute constante. El mejor plan es el más simple. Subir cuesta arriba y bajar, recorrer calles, descubrir rincones y disfrutar de las paredes llenas de hojas y las vistas maravillosas. Al llegar fuimos a la oficina de Turismo que está en le entrada del pueblo y nos dieron un plano en el que le señalaron a los niños varios puntos que tenían que encontrar: el lavadero, la casa de los gatos y la puerta del gnomo. No hizo falta más. Los niños iban emocionados, mapa en mano, buscando los puntos.

Después del paseo tomamos un aperitivo y como había puestos de artesanía local y productos típicos, nos llevamos un rico bote de miel elaborada en la zona.

Sin duda un plan completo, fácil, familiar y muy muy recomendable.

PISTAS

Es muy importante llegar pronto, ya que el pueblo está cerrado al tránsito urbano solo para sus habitantes y tendréis que dejar el vehículo en el pequeño parking que hay antes de entrar. Se llena rápidamente. Después la cuesta se llena de coches. Si vas a comer en el pueblo es conveniente que reserves, los restaurantes tienen plazas de parking a las que puedes subir y te ahorras el estrés de aparcar abajo.

QUE VER

En la zona hay varias rutas y paisajes que merece la pena visitar. Te recomiendo estos.

  • Dehesa de la Oliva. Sendero donde encontraremos por ejemplo ePontón de la Oliva, el Canal de Cabarrús, la ermita de la Virgen de la Oliva y la Cueva del Reguerillo. Esta cueva es la más grande de la región, está repleta de marmitas, meandros, estalactitas y estalacmitas que han atraído a curiosos, espeleólogos y vándalos y se la conoce como la Altamira Paleolítica de Madrid. 
  • Presa de El Atazar. Se encuentra a 11 kilómetros y se sitúa sobre el río Lozoya, en una zona de pizarras.
  • Senda ecológica de El Barranco. Es el camino que une Patones de Abajo con Patones de Arriba.

Si os pasa  como a mi que hace años que vais, os recomiendo volver.

 

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