Guía definitiva de ejercicios de piscina

Situándote en el bordillo da un zancada enorme hacia adelante y cambia de pierna. Repite este ejercicio 10 veces.  Si quieres conseguir una rutina más completa puedes combinar este movimiento con zancadas laterales.

Para trabajar brazos y piernas salta con las piernas muy estiradas abriéndolas. Al mismo tiempo mueve los brazos de arriba a abajo. El agua es un medio que impone una resistencia mayor por lo que fortaleceremos y tonificaremos las extremidades muchísimo en este medio.

Este sencillo ejercicio es muy beneficioso para trabajar nuestra ejercicio y también para fortalecer nuestra piernas. Simplemente alterna en sesiones de 30 segundos con cada pierna elevada a la altura de la cadera.

Para trabajar tus abdominales agarra una bola de playa contra el vientre y rota hasta quedarte boca abajo y aguanta ahí 5 segundos.

Andar o correr bajo el agua es muy recomendable porque nos costará mucho por la resistencia que opone este medio. De esta forma tendremos que ejercer una mayor fuerza.

Conviene además bucear y nadar ya que son ejercicios en los que movemos buena parte de nuestros músculos mientras que disfrutamos de un buen chapuzón.

Si no quieres llamar la atención con tus ejercicios de piscina puedes decantarte con este sencillo movimiento con el que ejercitarás tus piernas de forma muy disimulada. Simplemente mueve tus piernas desde el bordillo para arriba y abajo.

Para fortalecer tus tríceps realiza este ejercicio tan fácil: impúlsate con tus brazos para salir de la piscina agarrándote en la escalerilla. Recuerda que solo puedes usar tus brazos.

Una versión de los burpees en la piscina es la siguiente: durante un minuto trata de salir de la piscina de un salto apoyando tus manos en el bordillo. Repite el movimiento todas las veces que puedas.

Caminar de puntillas por la piscina fortalecerá no solo tus piernas en general sino específicamente tus gemelos por la resistencia que opone el agua al hacer el ejercicio.

Apoyando tus manos en el bordillo o valiéndote de un churro de plástico intenta saltar con las piernas estiradas y realizar con ellas un ángulo menor que 90º. Te vendrá genial para trabajar abdominales y piernas.

Uno de los ejercicios clásicos de piscina es el pedaleo. Puedes realizarlo envolviendo tu cuerpo en un churro y descansando tus brazos sobre él y durante 3 minutos pedaleando todo lo más rápido que podamos.

Escala las paredes de la pared de la piscina como si estuvieras subiendo por una escalera sin apoyarte en el suelo mientras mueves los brazos en círculos. Este curioso ejercicio te ayudará a tonificar tus brazos y piernas.

Levanta tus rodillas hasta el pecho y repite este ejercicio cuantas veces puedas y cada vez más rápido. Trabajarás abdominales y los músculos de las piernas.

Os proponemos una nueva versión del crol: haz un recorrido de cuatro recorridos de  100 metros nadando en esta modalidad pero apretando el abdomen e intentando  mantener en la superficie del agua la cadera, los hombros y la espalda. Cada 100 metros realiza una parada.