Tiene 23 años pero todo el futuro por delante. Descubre conmigo a esta nueva diseñadora que ha entrado en el mercado nupcial pisando muy fuerte.
Su primer contacto con las novias fue hace ya 6 años, de la mano de Alma Aguilar. En aquel momento nada le hacía presagiar que su primer diseño de novia le iba a enganchar para siempre, en este mundo se siente satisfecha y feliz de poder realizar el traje más importante de la vida de muchas mujeres.
Recuerda aquel primer vestido de novia con mucho cariño, ese que inevitablemente marcó un antes y un después en su carrera. Aquel año realizó 2 vestidos más de novia, pero en lo que llevamos de este ya van 34.
Más de la mitad de las novias que llaman preguntan por este vestido con el que Isabel se estrenó, aunque a ella realmente lo que le gusta es bocetar para cada novia, con el único objetivo de sacar lo mejor de cada novia.
Confiesa que realmente cree que las novias se han quedado a su lado, después de visitar otros talleres, por la cercanía y la confianza que su atelier transmite. Sus clientas, más bien jóvenes, la eligen a ella por sus líneas frescas, sutiles, rejuvenecedoras y nada recargadas.
Isabel es un híbrido muy bien conjugado, es clásica y moderna al mismo tiempo. Atemporal, contemporánea y divertida.
Le pregunto si encuentra mucha diferencia entre diseñar en color a diseñar en blanco. Y es que, con el blanco pueden perderse muchos detalles salvo que tengas la oportunidad de poder apreciar el traje de cerca.
Es complicado por eso, porque cuando se dibuja a lápiz (en blanco y negro, en definitiva), las aplicaciones del traje parecen más importantes, parecen más de lo que luego efectivamente se van a ver. Así, entre lo invisible y lo excesivo hay una peligrosa y delgada línea. Isabel dictamina con sabiduría que un traje de novia 100% blanco hay que diseñarlo con una visión de cerca y de lejos.
Su tela fetiche es el crêpe de seda, le encanta trabajar con tejidos ligeros y buena caída, y es que todas sus novias tienen un denominador común: quieren sentirse cómodas.
Otras telas, como el mikado o los brocados pesan demasiado, y ellos los sustituye por seda rústica y tejidos con la trama más gorda, de lino y seda por ejemplo.
Hablando de telas se ve que entiende, que las conoce y que le apasiona lo que hace.
Isabel boceta en exclusiva para La Champanera. Se inspira en el verano y en los campos tiroleses de Austria, y en esa inspiración surje un vestido de aire onírico realizado en capas de chifón de seda sobre crêpe, fresco y con mucho movimiento. Como toque final, pétalos de chifón bordados en el escote y en el fajín junto con cordón rústico de seda en diversos tonos crema. ¿Qué os parece?
A pesar de su corta edad, no le falta razón en ninguna de sus afirmaciones. Por lo general, pocas novias se salen de la normalidad porque sienten miedo a llamar la atención. Quieren que su vestido guste no solo a ellas sino a todo el mundo. La novia extravagante es la excepción, no la regla. «El vestido más loco que vaya a hacer aquí creo que va a ser el mío.» me confiesa Isabel entre risas.
La Champanera: «Isabel, ¿dónde te ves dentro de 10 años?»
Isabel: «Me conformo con poder vivir de mi trabajo y mejorar mi maestría año tras año.»
Y es que entre los grandes se van abriendo paso nuevas promesas, y ellas también tienen cabida en @LaChampaneraLW.
Enhorabuena Isabel, ¡sigue así sin que nada te detenga!
Su estudio se encuentra en la calle Don Ramón de la Cruz 46 (Madrid), podéis localizarla en el 699093777 o en info@inunez.es.
Un besote, Ana.
Nos encanta Isabel!Y con cada nuevo vestido que vemos más!
Me encanta!Enorabuena!
Q ilusión ver a una niña de 23 años empezando a triunfar!!!! Espero q le vaya muy bien; sus vestidos son muy bonitos!!!
Enhorabuena Isabel y a La Champanera por sacar este artículo y ponernos unas fotos tan buenas
Hace vestidos maravillosos..
¡Enhorabuena Isabel!
Espero que tengas mucho éxito y que sobre todo disfrutes de tu trabajo.
Un abrazo
Enhorabuena Isabel!!!que vestidos tan preciosos!me han encantado todos! espero que sigas teniendo mucho éxito.
El caso de mi hermana (novia) y de mi madre con INunez es la peor experiencia vivida en los días previos a la boda. Una vez entregado el vestido de la novia el día anterior, le tuve que coser en casa una cinta con plomos para sujetar el sujetador en centro delantero y que no se le moviera. Admitió que «nunca lo hubiera imaginado poner». El vestido de la madre de la novia, lo entregaron 5 horas antes de la boda y también admitieron «no haber hecho antes un volante con tarlatana». No quiero ahondar en detalles técnicos pero NO recomiendo I Nunez a nadie. En nuestro caso 2 vestidos de 2 fueron una pesadilla. LA creatividad hay que saberla ejecutar en las telas. Esto es «Alta Costura fresca» como se lee en su web?