No te pierdas la bonita boda de Elisa y Luis celebrada en una de las Iglesias más bonitas de todo Burgos.
Para el gran día, Elisa confió en su peluquería de toda la vida, Nueva dimensión. Indecisa frente a su recogido, optó por uno completo para la ceremonia y otro semirecogido para el baile. Estaba realmente favorecida con ambos estilismos. También Nueva Dimensión se encargó del maquillaje, destacando su mirada y los labios con un tono cereza.
Elisa escogió un vestido de Diego Estrada. Tenía una idea muy clara en la cabeza y el diseñador la supo materializar. Para ella era muy importante que fuese un vestido versátil, que se pudiese ir desmontando a medida que avanzaba el día para evitar pasar calor a pesar de que la boda fuese un 3 de diciembre.
A priori aparentaba ser un sencillo vestido, pero lo mejor estaba por descubrir. El traje era de manga larga realizado en crepé blanco con cinturilla y unos botones en los hombros a modo decorativo de terciopelo granate.
Sobre el vestido se montaba una sobrefalda que permitía aumentar la cola del vestido. Otro de los detalles fue la capa de lino que utilizó para la ceremonia. Un vestido súper completo y romántico que le permitió disfrutar de 3 vestidos diferentes durante el gran día.
Elisa quiso darle todo el protagonismo a su precioso vestido, una auténtica obra arquitectónica y llevar únicamente 2 complementos.
Por un lado, el bonito tocado de la firma Marucca, que entrelazaba hojas doradas en su pelo. Por otro, los discretos pendientes diseñados por su amiga Hanna de Gold and Roses como únicas joyas.
Para continuar con la mezcla blanco y granate, Elisa completó su look con unos zapatos realizados en terciopelo granate de Lodi, la guinda de todo el look.
Todo el estilismo casaba a la perfección con el colorido ramo creado por Macarena de Floristeria Palmero, bastó con anticiparle una pequeña descripción del vestido para que entendiera a la perfección lo que la novia buscaba.
Contrajeron matrimonio en la Iglesia de San Nicolás, una de las más bonitas y antiguas de la ciudad de Burgos, con una riqueza arquitectónica interior que imponía con solo mirarla.
De la decoración de la Iglesia también se encargó Floristería Palmero. Una ceremonia preciosa donde muchos invitados (y novios) no pudieron contener las lágrimas.
Tras tantos momentos de emoción, novios e invitados se dirigieron a El Landa, un hotel muy conocido de Burgos que todos los invitados recordarían con un cariño especial.
Y mientras todos los invitados llegaban al hotel, los novios decidieron aprovechar unos minutos a solas para llevar a cabo su reportaje de boda. Lo tuvieron muy claro desde el principio: Bellepok era su mejor opción.
Para no perder ningún detalle de ese día tan especial decidieron contar con 2 fotógrafos y un videógrafo ya que eran muchos invitados y tal y como me confiesa Elisa, fue un resultado maravilloso.
Tras la llegada de los novios comenzó la fiesta; el cóctel y las copas se celebraron en la piscina de estilo gótico y disfrutaron de la deliciosa gastronomía a cargo del hotel. Un momento muy especial amenizado por 2 músicos que tocaban a la perfección el saxofón y el piano a ritmo de jazz.
Una velada preciosa en la que se creó una atmósfera mágica y acogedora gracias a la decoración de Garbo Events que dispuso hogueras, velas y candelabros.
Cuando la cena en el salón comenzó, ante las dudas, la novia decidió tirar el ramo y que cada soltera corriera su propia suerte. Pero lo lanzó con tantas ganas, voló muy encima de donde esperaban hacerse con él sus amigas.
Tras este divertido momento, escogieron el romántico “El vals de las flores”para abrir el baile que estuvieron ensayando, nada más y nada menos, que dos meses antes de la boda cuya destreza podréis comprobar al final del vídeo también firmado por Belleepok.
Espero que os haya gustado esta bonita boda.
Un beso, Ana.
