¿Qué tendrá el misterio que siempre nos atrapa? No podríamos dar una respuesta exacta, pero de lo que no hay duda es que es algo que nos resulta extremadamente atractivo. Y la obra de Mercedes Bellido tiene mucho de ambos (de misterio y atracción). Para los que no la conozcáis, Mercedes es ilustradora y pintora, es de Zaragoza aunque vive en Madrid y, además de pintar, es directora de arte de la marca Kling. Como ella misma dice (y no le falta razón) lleva una vida de súper heroína.
Hoy hablamos con ella para conocerla más de cerca y descubrir sus inquietudes.
¿Cuándo nació tu pasión por la pintura y la ilustración?
Desde pequeña he tenido un lápiz en la mano. Es difícil saber con exactitud cuando empezó mi afición por el dibujo, pero desde luego ha terminado por ser mi verdadera ocupación.
¿En qué te inspiras para crear tus obras?
Todo es susceptible de que me pueda servir en algún momento para inspirarme. Nunca sabes con qué se te puede encender la bombilla, aunque es cierto que tengo debilidad por ciertos elementos. Eso sí, si algo no puede faltar en mi proceso creativo es la música.
¿Cuáles son tus artistas favoritos? ¿Cómo han influido estos en tu carrera y en tu forma de crear?
Últimamente estoy variando un poco, pero siempre hay nombres que permanecen como Rousseau, De Chirico, Hockney, Matisse o Tanguy. También me interesan artistas como Aleksandra Waliszewska, Neo Rauch, Danny Fox, Ian Stevenson, Rhys Lee, Kotie Paloma, Jon Koko, James Ulmer… Hay mil.
Algunos han influido y otros simplemente me gusta lo que hacen aunque no tenga nada que ver con mi trabajo. Es cierto que de Henri Rousseau tengo la vegetación exuberante, de De Chirico las construcciones y las sombras, de Aleksandra Waliszewska cierta oscuridad y misterio y antes usaba una paleta de colores más pastel quizás influida por Hockney. Al final tú eres el que va creando tu propio universo a partir de tu archivo visual.
¿Con qué técnica pictórica te sientes más a gusto? ¿Hay alguna en especial que se te resista y que te gustaría dominarla?
Normalmente utilizo el acrílico y la tinta china, pero también me interesan los métodos de estampación gráfica. Por el momento estoy cómoda con las que utilizo, en la universidad usaba óleo por obligación y le cogí manía.
¿Cómo definirías tu estilo a la hora de pintar?
Al principio era más naif, cuando dominaba menos la técnica, pero poco a poco me he ido atreviendo con composiciones más complejas y probando con colores más sobrios… No sé, al final voy cogiendo cosas que me parecen interesantes e intento encontrar la forma de que todo funcione. Lo que pretendo al crear las imágenes de mis pinturas es reproducir una sensación de misterio o de cierta inquietud por el qué pasará.
Las calaveras son elementos clave en tus obras, ¿qué te atrae de ellas? ¿Qué importancia tiene la muerte para ti?
La muerte siempre me ha fascinado, es algo inevitable y contradictorio puesto que sin ella no sería posible la vida. Me parece un ciclo demoledor y hermoso a la vez. Las calaveras son únicamente la representación más directa de la muerte, y más concretamente de la muerte del ser humano.
Acabas de inaugurar la exposición ‘Todo muere bajo el sol’, ¿qué tal ha sido la acogida y qué podemos encontrar en ella?
Estoy súper agradecida con la acogida ya que han venido muchas personas a ver la exposición y aún quedan unos días antes de que termine (hasta el 28 de mayo en el Espacio Ananas, en Madrid). La verdad es que ha suscitado mucho interés en la gente y de ahí también me han surgido más trabajos gracias a la visibilidad que ha dado el Espacio Ananas.
¿Cuáles son tus próximos proyectos?
Estoy preparando un mural para el Festival de Les Arts en Valencia para este mes de junio y la verdad es que tengo muchas ganas de formato grande. También tengo pendientes varios diseños para portadas de discos y en diciembre una nueva exposición individual en la galería Plastic Murs. No me quejo.
¿Cómo es el día a día de Mercedes Bellido?
Pues llevo una vida un poco de súper heroína: por el día trabajo como directora de arte en Kling y por la noche trabajo con el pincel. Pinturas y papeles por todas partes, desde que me levanto hasta que me acuesto. ¡No paro!
Si no te dedicaras a la pintura y la ilustración, ¿qué te gustaría hacer?
No podría dejar de pintar nunca, creo que es mi mayor adicción. Si me tocara la lotería me iría al campo, tendría caballos y motos y no sé si me dedicaría a algo que no fuera pintar.
* Imagen de portada: © Pelillos de ratón