Carnaval, carnaval… La peque estos días está como loca. Sin parar de jugar, disfrazarse y deseando ir al cole por las mañanas para continuar con la fiesta. Es impresionante poder volver a vivir estas cosas, a través de ella de nuevo. Así que dando vueltas a la cabeza, he pensado en diseñarle un rincón de disfraces.
La ilusión de estos días me ha hecho pensar que los disfraces son una parte muy importante de su juego, mucho más ahora que entra en la fase representativa y todo el día quiere ser mamá, doctora, aventurera, cocinera o princesa.
Si piensas como yo y crees que los disfraces son geniales para fomentar su imaginación y sus ganas de jugar, puedes pensar en crear un pequeño rincón de disfraces donde todo esté a la mano (sabéis que este punto es básico para la metodología Montessori) y ellos mismos puedan jugar a combinar distintas prendas.
Incluso, es una forma muy sencilla de fomentar su autonomía y hacer que ellos mismos empiecen a vestirse y desvestirse solitos. ¿Ya estás convencida? Pues mirad el rincón de nuestra querida Estoreta, el buen gusto de esta chica no tiene límites.
Lo básico será contar con unos percheros o un burrito para la ropa,si tenemos más espacio. Al mismo tiempo que alguna caja o jugueteo, para que todo permanezca en orden y ellos puedan recoger y sacar sin problemas.
Si os ha gustado la idea y ya estáis dando vueltas a cómo podéis ponerla en práctica aquí os dejo algunos de los accesorios o muebles que son básicos. Los encontráis todos en ICON DECO.
