No te lo puedes perder porque no faltó detalle. Los proveedores más grandes del sector nupcial se juntaron para participar en esta boda de ensueño.
Conocí a Jimena en la universidad y retomamos el contacto meses antes de su gran día. Lectora habitual de La Champanera, Jimena me encargó unas bailarinas para su boda que encajasen con todos los detalles que ella había preparado con tanto mimo. Y así comenzó mi idilio con su gran día. Una maravilla.
Esperaba ansiosa las fotos de Click10, andaba como loca imaginándome cómo había ido todo. Y no podía parar de sonreír cuando llegó el reportaje sin lograr una criba, todas las fotos eran la pera.
Con Marieta Hairstyle (peluquería) y con Ana Reyna (maquillaje), dos cracks, Jimena se sintió tan cómoda que acabó tomando un Gin Tonic antes de la ceremonia. El buen rollo pedía un brindis a gritos.
Su vestido me encantó, un precioso diseño de Laure de Sagazan con la espalda descubierta, botonadura perlada y discreta cola. Ideal para una boda en el campo. Aunque Jimena se hizo con su vestido en Londres, en Madrid podréis encontrar estos diseños en Flor de Asoka.
Como complementos, Jimena escogió un precioso tocado de Suma Cruz en tonos plata y verde que yo me pondría a todas horas. Hasta para tender lavadoras como quien dice. Además, unos magníficos pendientes de platino y oro blanco de su madre que sólo pudo acompañarla con el alma ese día.
Jimena se arregló en la preciosa suite de novios de Finca Aldeallana, una finca de bodas maravillosa que conozco de forma muy cercana y en la que hace poco tuve la suerte de disfrutar de un inolvidable día de campo. Y allí mismo, con el cariño que pone el equipo de la finca en todas sus celebraciones, con la brutal decoración floral de Victoria Cubo y con las exquisiteces del Catering Ciboulette, comenzó la fiesta.
La entrega del ramo también fue especial y la foto de Click10 es una gozada. De hermana a hermana. Yo las veo a ellas y no puedo evitar pensar lo mucho que echo de menos a las mías.
Ya con los decibelios rompiendo la barrera del silencio, el grupo Sala and the Strange Sounds así como el DJ Mikistrello (acual DJ de Pachá) comenzó el baile. Los novios primero, los invitados después. Y como la ocasión no merecía menos, la novia terminó la noche calzada en unas superga y el resto de invitadas en mis bailarinas.
¿Qué puedo decir? Mil felicidades y mil gracias. Un besote, Ana.
Qué gran sitio Finca Aldeallana!! Me chifla todo!