Joven emprendedor emigra a Suiza y al volver crea una marca de éxito. La historia bien podría ser de ahora, pero José Luis Iturriaga fundó la firma de calzado Gaimo en 1975 en Arnedo (La Rioja). Lo que empezó siendo un taller artesanal de alpargatas ha surtido desde entonces a zapaterías nacionales e internacionales y ya tiene la vista puesta en la venta online. Hablamos con Esmeralda, la mayor de sus cuatro hijas, que hoy está al frente del equipo de diseño y ayuda gestionar la empresa junto a sus tres hermanas.
Sois una empresa familiar con una larga trayectoria ¿Qué cosas han cambiado desde que empezasteis?
Gaimo conserva la misma tradición artesanal en la fabricación de sus alpargatas desde sus inicios, pero hemos aplicado nuevas tecnologías sobre todo para mejorar la calidad de los zapatos. También se ha evolucionado en el diseño, contamos con un equipo renovado y joven, con carácter propio pero con gran gusto para la moda, y eso se refleja en nuestras colecciones. En los noventa nuestros modelos eran mucho más clásicos y tradicionales, hoy Gaimo es más femenino, fresco y colorido. Los materiales también han evolucionado, siempre hemos apostado por materiales naturales y de máxima calidad pero ahora son mucho más sofisticados y originales.
Empezasteis siendo una empresa de alpargatas y éstas siguen siendo unas piezas clave en vuestras colecciones de verano, ¿es difícil reinventar con éxito un clásico cada temporada?
La verdad que cada vez es más difícil, tenemos mucha competencia, hay mucha información y al final está casi todo inventado. Sin embargo, cada año nuestro reto es crear construcciones diferentes para nuestros zapatos y diseños, con un toque original y especial pero siempre manteniendo nuestra base artesanal.
Vuestros zapatos transmiten comodidad. ¿Marca esta característica el proceso de diseño?
Totalmente, la comodidad está en primer lugar nuestra lista de prioridades. Un cliente puede enamorarse de un zapato, pero si al probarlo no es cómodo no lo comprará. Sin la comodidad el resto no funciona.
¿Qué es lo más importante para que un zapato cumpla esta característica?
Un buen desarrollo de la horma y de la suela, una plantilla acolchada y utilizar cortes con tejidos y pieles blandas.
¿Qué ventajas aporta el proceso artesanal?
Sobre todo el look que da a un zapato es mucho más bonito y especial y además se diferencia totalmente del resto de zapatos, porque cada uno está hecho a mano. La tradición y el gusto de los artesanos por el trabajo bien hecho se nota y además el cliente valora y también percibe la artesanía.
¿En qué te inspiras para crear las colecciones?
El mundo de la moda se mueve por unas ideas generales, unas tendencias que cambian y se renuevan cada temporada. Nosotros estamos atentos a ellas, pero también Gaimo tiene su propio carácter e intenta imprimir su sello personal a cada una de las tendencias.
¿Cuáles son los materiales más utilizados en la última colección?
Materiales suaves y naturales como el lino, crochet, tweed, rafias y lonas están presentes en nuestra colección. Flecos, borlas, cordones, brillos, colores metalizados y tierra se mezclan para crear alpargatas perfectas para los días de verano.
¿Tres pares de zapatos que no pueden faltar en ningún zapatero?
Una alpargata, un deportivo y un blucher masculino.
¿Dónde podemos comprar Gaimo?, ¿os planteáis abrir tienda online?
Lanzaremos nuestra tienda online el próximo Marzo. Actualmente vendemos a más de 1.000 tiendas en España y estamos totalmente enfocados en la exportación desde hace más de 30 años, vendiendo a los mejores escaparates de cada continente como Isetan en Japón, Galerias Lafayette en Francia ó Palacio del Hierro en México.
