Hemos tenido el placer de conocer en profundidad a Belén Vázquez y a su familia, y solo os podemos decir dos cosas: que sus hijos parecen angelitos caídos del cielo y que ella es de esas personas que una vez que la conoces no quieres que salga nunca de tu vida.
Es madre, bloguera y esposa, y desde luego, además de natural y sencilla, es una mujer todoterreno.
Tiene muy claro cómo educar a sus hijos sin descuidarse a sí misma y a los que la rodean y si alguien tiene dudas sobre ser madre o tener una familia numerosa, Belén las despeja todas transmitiendo seguridad y amor en cada una de sus palabras.
¿Por qué decidiste empezar el blog?
A raíz de mi primer embarazo, comencé a buscar, a indagar y a interesarme por el mundo niños. Hasta la fecha no me había metido de lleno. Me encantan los niños de siempre, tengo 17 sobrinos y soy casi tan niña como ellos (risas). Descubrí que había mil firmas desconocidas, mil ideas nuevas, muchas dudas como madre primeriza, mil planes… Al año y pico de nacer las gemelas, la directora de Telva me propuso escribir el blog y no me lo pensé. Ha sido una época preciosa, supuso mucho esfuerzo ya que tenía que actualizar tres veces por semana y con las niñas en casa, a veces me era imposible pero al final, no se cómo, supongo que por arte de magia, salía todo para delante.
¿Cómo te ha cambiado la maternidad? Si tuvieras que darle un consejo a una futura madre, ¿cuál sería?
Uff, imagínate, ha cambiado mi vida 360 grados. En 4 años he tenido 4 hijos y las primeras fueron gemelas. Empecé fuerte en esto de la maternidad (risas). He dejado de hacer cosas o planes, de tener independencia, ahora voy pendiente del reloj constantemente, duermo menos, tengo menos tiempo para mi, mi marido y también para mis amigas, pero he ganado en madurez, en generosidad, en paciencia, y no lo cambio por nada del mundo. Además, los planes, la sensación del reloj pegado al cuerpo, el no dormir… Todo eso con el tiempo vuelve a su ser. Esto es una carrera de fondo.
¿Mi consejo? Quizá cultivar la paciencia, que yo no la tengo y me he tenido que encontrar con ella a golpe de esfuerzo, respirando (muy) hondo y contando hasta 100 muchas veces (risas). También cultivar el sentido común, hoy en día leo tanta tontería a la hora de educar y alimentar que pienso que hay que ser más sencillos. Yo siempre pienso como me educaron a mí, que comía, que planes hacía y de verdad que mis padres no se comían tanto la cabeza. Yo me lo he pasado fenomenal partiendo piñones, haciendo cabañas, jugando al rescate, comiendo chocolate, gominolas y fruta en las mismas cantidades. Mis cumpleaños se basaban en una piñata, una merienda con gusanitos y poco más y era la niña más feliz del mundo. Las modas nos complican tanto la vida y con ellas, se la complicamos a nuestros hijos.
Después de lidiar con niños, trabajo y casa, ¿Cuál es tu momento favorito del día?
Sacar a pasear a Paco, nuestro perro, con mi marido. Es nuestro momento, donde aprovechamos para hablar de nuestras cosas tranquilamente y contarnos nuestro día. Y sin duda, el mejor momento del día es cuando me meto en la cama y la casa esta en silencio. Aprovecho para leer, hojear revistas de decoración (mi pasión) y «pinear» en Pinterest sin parar, aunque he de confesar que duro cero, me quedo dormida enseguida (risas) . También disfruto mucho cuando me tumbo con las gemelas en su cama (Sofi todavía es pequeña y en su cuna no quepo y Juanito no está en el momento de hacerlo) y me cuentan su día, sus amigos, me preguntan cosas divertidísimas. Antes de irme siempre me hacen la misma pregunta: ¿mamá cuanto queda para ir a Disney?
¿Cómo sacas tiempo para mimarte a ti misma?
Acabo de dar a luz hace dos semanas y ahora el tiempo para mi escasea. La verdad que últimamente no he tenido mucho tiempo para mí. Pero te diré que nunca he sido de cuidarme mucho, me arreglo en 5 minutos y cada vez me da más pereza ir de compras. Soy muy desastre.Nunca he sido muy de peluquerías y sucedáneos (risas). Pero creo que ya va siendo hora de darme a la materia beauty que los años empiezan a pesar.Cuando tengo tiempo para mí aprovecho para ir a hojear tiendas de decoración o me divierte ir de compras para las niñas y ahora también para Juanito.
Además de tu familia, ¿qué te motiva? ¿Cuáles son tus aficiones?
Me encanta viajar, y la decoración, sin duda, mis grandes pasiones. Viajar a cualquier lugar, conocer sitios y culturas nuevas; ahora se me han metido en la cabeza Perú, Canadá y Nueva Zelanda pero también Asturias que no lo conozco y Menorca. Además, me encanta tomar algo con mis amigas y hablar horas y horas de nuestras cosas, probar nuevos restaurantes, el campo, la naturaleza, el verano, la comida de mi madre, la fotografía, caminar, el tomate y el queso en todas sus versiones, cocinar, ir descalza a todos lados…Cosas sencillas, los placeres básicos de la vida. ¿Mi época favorita del año? Los veranos en el campo con toda mi familia.
¿Qué objetivos te planteas para el futuro?
Ahora mismo estoy centrada en mis hijos y su educación. No me quiero perder nada de ellos y esta época tan bonita. Pero no descarto montar algo relacionado con niños o estudiar algo relacionado con el interiorismo. Y cuando los niños sean mayores, no nos necesiten y pasen de nosotros (risas) me encantaría irme a vivir al campo con mi marido, tener una huerta, plantar mil flores y tener 4 o 5 perros.
¿Qué tendencia, tanto del mundo de la moda, cómo del mundo de internet, social media, no utilizarías jamás?
Soy cero de tendencias pero quizá en mi vida me pondría el chándal y la bomber en clave deluxe, los mules y el estilo Victoriano. En cuanto a las redes sociales, creo que nunca sincronizaría mis publicaciones en todas las redes sociales. Me gusta personalizar y utilizar un contenido acorde a cada red. Aunque solo tengo perfil de Mi pequeña tribu en Instagram. Es la red social que más me gusta.
¿Quién es tu icono de estilo?
Mi madre y cualquiera de mis tres hermanas. Carolina de Mónaco y sus hijos. Diane Kruger. Las francesas Lou Doillon y Jeanne Damas. Steve Mcqueen y Paul Newman.
Si tuvieras que definir a tu familia en una palabra, ¿cual sería?
¿Solo una? ¡Que complicado! Mejor dos: unida y divertida.
¿Qué consejo le darías a tus hijos para el futuro?
Que luchen por sus sueños, sean buenas personas y se quieran y apoyen entre ellos, siempre.
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