
Ahora que llega el buen tiempo es hora de acicalar nuestros balcones, terrazas, porches, parcelas, o el pedacito que sea que tengamos para disfrutar del aire libre.
Lo más importante antes de meternos de lleno con la decoración es ser conscientes del espacio del que disponemos. Actualmente existen casi infinitas opciones en cuanto a mobiliario de exteriores se refiere. La clave es escoger atendiendo a nuestros gustos y, por supuesto, al máximo aprovechamiento del espacio, además podemos seleccionar otros aderezos, accesorios como guirnaldas, banderines, flores… Con los que introducir una nota diferente y hacer de nuestro rincón de almuerzos, desayunos y cenas de verano un espacio exclusivo, estiloso y acogedor.

Si logramos crear un espacio de diseño, actual y agradable, disfrutaremos como nunca de nuestra gente y de los grandes momentos, porque estos ya sabemos que siempre se celebran en torno a una buena comida. Y si sois como yo, fieles amantes del desayuno, estaréis deseando comenzar un nuevo día para disfrutar de vuestro mejorado espacio de exterior.

A continuación os dejo una galería muy inspiradora y os doy algunas claves para que nuestro rincón de exterior sea perfecto:
Flores y plantas
Si tu caso es una terraza o balcón añade color con macetas y tiestos con flores de temporada, también está muy de moda tener tu propio huerto urbano, los hay de diferentes tamaños, así que si te gusta la jardinería y la alimentación ecológica, no dudes en disponer de un rinconcito para cultivar tus propios tomates.



Textiles de colores y estampados vivos.
Incorpora cojines y almohadas para crear espacios de confort, un espacio para la lectura o para la siesta es ideal cuando el tiempo acompaña. Los tonos vivos nos llenan de vitalidad y aportan luz, aprovecha que es tendencia el estilo étnico y tribal y llena de energía tu rinconcito al aire libre. Otra opción con la que acertar son los tonos pastel, tanto en textil como en accesorios (vajilla, cubertería, manteles…).
Los manteles también son fundamentales para crear un espacio para comer agradable y apetecible. Elige tonos vivos y materiales fáciles de limpiar. Decide cómo quieres que sea tu comida para elegir el estampado y el estilo de tu mantel (inspiración rústica, étnica, ibicenca, boho…).



Comodidad
No hay peor cosa que tener una comida y sentirnos incómodos, bien porque el asiento no sea lo más cómodo del mundo, o porque no lleguemos con facilidad a la comida, etc. Si nuestro espacio nos lo permite debemos escoger una mesa y unas sillas ni más ni menos que cómodas, para conseguirlo la clave es colocar cojines en asiento y respaldo. Después de esto podremos decidir el estilo que queremos, pero lo mejor es optar por materiales y tonalidades naturales y alegres, y fáciles de limpiar. Y por supuesto un material que no sufra demasiado ante los inconvenientes atomosféricos.




A la sombra de los pinos.
No te olvides de crear zonas de sombra!! A la hora de comer a nadie le apetece que el sol le dé de lleno, si esto le ocurre a alguien le amargarás la comida. Busca la solución que más se adapte a tu espacio, una sombrilla, un toldo, un porche cubierto por una enredadera… O si no diseña diferentes espacios, colocando la mesa del almuerzo siempre a la sombra o bajo techo.



Nos vamos de picnic!
No es necesario irnos al campo para crear un ambiente, tanto si dispones de terraza, como de un patio puedes crear tu propio picnic y disfrutar de una jornada de lo más campestre y natural. Coloca una gran manta en el suelo, sobre ella una mesa baja de madera o una gran cesta de la que cada comensal pueda coger sus útiles necesarios para el almuerzo, decora con flores y tira almohadones alrededor para que todos se sientan cómodos. La clave es definir el estilo y optar por una misma gama cromática para decorar.


Iluminación
Los días de verano ya sabemos que son largos y las horas de sol duran más, pero cuando estamos a gusto tendemos a alargar las comidas y acabamos con una merienda-cena, ¡es así! Por eso no debemos despreocupar la iluminación artificial, opta por una luz tenue y cálida y que no atraiga los mosquitos. Coloca velas, yo te recomendaría que no fueran aromáticas porque éstas no son muy agradables si se mezclan con los olores de la comida.
También puedes colocar candelabros colgados de las ramas de un árbol, si dispones de una parcelita o jardín o guirnaldas de luces a lo largo de la barandilla de un balcón.




Más ideas por si tienes la suerte de tener un trocito de balcón, un patio o una azotea!