Decoración nórdica en su máxima expresión, esto es lo que nos encontramos en esta vivienda sueca de tonos suaves, luminosos y con una atmósfera confortable a la par que sofisticada.
El estilo escandinavo es todo un arte de vida
Es una visión del mundo, un estilo de vida puro, sencillo, minimalista… Todo esto se refleja en los hogares de los Países Nórdicos y este apartamento es un fiel ejemplo de ello, paredes y techos claros, ventanas grandes por las que entra esa luz clara, pero al mismo tiempo un tanto apagada y tan característica de estos países. Una vez más los muebles justos, tienen mucho más protagonismo las estancias por su amplitud y por estar poco recargadas que cualquier pieza decorativa. Tonos neutros en todas las estancias y tendencias nórdicas como los aparadores de inspiración industrial acabados en blanco, las mesitas auxiliares del salón y la zona de comedor ubicada al fondo de la cocina.
A grandes rasgos, se trata de un hogar de ambiente relajado, en donde se respira calma, serenidad y buen gusto.