
The Newsroom finalizó su segunda temporada el domingo con un episodio 100% sensiblero, emocionante y de estos que sabes que no es televisión de culto pero no puedes evitar seguir enganchado a la pantalla.
Como muchos dicen, se trata de una serie a la que se profesa un amor-odio continuo. En mi caso se inclina más hacia lo primero (véase aquí el porqué), con muchas cosas que no me gustan nada. Entre ellas están los discursos grandilocuentes sin el espíritu de los que hilaba Aaron Sorkin para El Ala Oeste de la Casa Blanca (tengo la suerte de haber empezado esa serie hace poco y disfrutar por primera vez de una de las mejores series jamás emitidas), y lo extraño que es el personaje de Sloan. Me parece totalmente inverosímil la manera en la que la tratan. En fin, no creo que el pasatiempo del presentador de un programa de noticias sea interrumpir e ignorar a su compañera de plató en directo y delante del público. No obstante, Sloan (interpretada por Olivia Munn) se ha convertido en uno de mis personajes favoritos junto con Charlie, Mac y Will. Me encantan sus momentos con Neal (Dev Patel), y la historia con Don, que ha salido de la nada pero que tiene su aquel. Es divertida, directa, patosa, tiene frases graciosas, no sabe relacionarse con la gente, y además es lista. Así que dediquémosle el post de hoy.














