Los áticos se están revalorizando y como para no! Cada vez se construyen pisos más pequeños y los áticos normalmente disponen de grandes terrazas y ventanales que dejan pasar la luz natural del día, con lo que conseguimos un efecto óptico de mayor amplitud.
Para que os deis cuenta de las posibilidades que tenemos en un ático, en cuestiones de decoración y aprovechamiento del espacio, os traigo una vivienda elegante y sofisticada localizada en Gotenmburgo, la segunda ciudad más grande de Suecia, bohemia y conocida como ‘La Puerta de Entrada al Norte de Europa’.
Su punto fuerte es la gran terraza cubierta de madera, que ahora que ha llegado la primavera, nos permite disfrutar de desayunos, siestas… Y todo lo que queramos al aire libre y, es que, estando en el centro de la ciudad, tener un cachito de suelo en el que disfrutar de aire puro es un auténtico privilegio.
Compacto y funcional, luminoso y de espacios abiertos. Con una decoración sencilla, nada recargada ni difícil de conseguir, pues se ha optado simplemente por el contraste de colores: el blanco puro de las paredes y de los muebles, con el suelo de madera natural y tonos oscuros para los textiles, que hacen de este ático un lugar atractivo y relajado. También me ha enamorado su iluminación, una instalación simple con bombillas que cuelgan y la guirnalda de luces a lo largo de todo el balcón.
