Los jarrones son pequeños detalles que pueden cambiar por completo un rincón de nuestra casa, aportan vida y estilo y no es estrictamente necesario que los utilicemos para colocar flores, que también, pero podemos elegir jarrones simplemente porque su diseño nos enamore y utilizarlos como accesorio decorativo en la casa o para otros usos almacenar los bolis en nuestro escritorio, guardar pinceles, guardar las pinturas con las que las chicas nos maquillamos, etc.
Los jarrones se adaptan perfectamente a cualquier estancia y espacio de la casa y sirven como comodín para completar esos pequeños rincones en los que muchas veces no sabemos qué poner, pero que necesitan algo para que nuestra decoración esté completa.
Jarrones de cerámica, de vidrio, jarrones reciclados que creemos con nuestras propias manos, jarrones de cobre, lisos o decorados con estampados como rayas, lunares… Actualmente están muy de moda los diseños geométricos, sobre todo dentro del estilo nórdico, estos aportan armonía y un toque muy sofisticado a nuestro hogar.
Como veis no hay excusa para que ningún rincón de nuestra casa, por pequeño que sea, nos quede desangelado, únicamente necesitamos un jarrón para llenar esos espacios que más abandonados parecen.