Las bodas de verano me gustan, pero he de decir que las bodas de entretiempo, las bodas de otoño tienen ese o sé que, qué sé yo que me encanta, y no tanto por el estilismo de la novia que también, sino por las invitadas, esas invitadas de otoño que tienen que hacer malabares mentales en cuanto a elegir look se refiere.
Y es que me parece mucho más fácil escoger el look para una boda en verano, no importa si es vestido largo, corto, conjunto de pantalón, falda o un mono. Sabes que irás de tirantes o como mucho manga corta, sandalias y una amplia gama de colores donde elegir, desde los más clásicos hasta los más llamativos.
Pero en una boda de otoño, en la que igual ni hace frío ni hace calor, menos mal que descartamos las pieles, pero ¿y el terciopelo? Es un tejido de otoño que incluso lo hemos llevado a finales de verano, ¿y los tirantes? Porque igual tampoco hace para ir a hombro descubierto. ¿Y los zapatos? Igual nos arriesgamos con sandalias y resulta que se nos quedan cual cubitos de hielo…
Por todas estas razones y alguna más que me dejo en el tintero, me parece que las bodas de otoño y sus invitadas son lo más, porque sabes que habrá variedad de estilos en la boda y porque además no parecer un cuadro resulta más difícil que nunca, y por eso me gustan tanto las bodas en otoño, porque igual te encuentras con una combinación que en tu cabeza era impensable pero que alguien se ha atrevido y resulta que te llevas una grata sorpresa al verlo.
En cualquier caso, el otoño y más al principio, está para arriesgar y si eres de las que adoras el verano, no te cortes y lánzate a ponerte ese vestido de color empolvado que tantas ganas tienes de ponerte y por qué no unas sandalias, aunque depende de la zona igual conviene buscar un calzado destalonado que tanto se llevan esta temporada y que al menos protegerá algo tus pies de las bajadas de temperatura ¡y los pisotones! 😉
Pero si eres de las que ansían la llegada del otoño, enfúndate en ese maravilloso vestido de terciopelo en burdeos, o porque no en verde oliva como este de Teresa Helbig que me parece sencillamente ideal.
Si no quieres arriesgarte a pasar frío, opta por un vestido, mono o blusa de manga larga en un tejido suave, y si te lanzas a un escote asimétrico como el de este vestido de The 2nd Skin Co. o los tirantes una chaqueta o estola te sacará del apuro de la bajada de temperaturas.
¡Os dejo unas fotos de inspiración que espero os sirvan para coger ideas y ser las perfectas invitadas de otoño!
Fotos: Pinterest y Vogue.es