Tengo 4 hijos, cada uno de su padre y de su madre. Si uno dice blanco el otro dice negro. Si a uno le encanta el fútbol al otro le gusta el ajedrez. Y así con todo. En lo único que se ponen de acuerdo de siempre es en que les encanta disfrazarse. Cualquier excusa es buena: si una tarde están aburridos, se ponen un disfraz y se alegra el día. Si vienen amigos a casa, ídem. Siempre es una buena idea.
Jugar a disfrazarse es algo mágico y necesario. Cuando el niño se viste de un personaje y se imagina una historia con ese disfraz, está dando rienda suelta a su fantasía, a su espontaneidad y a su creatividad. A mí me gusta mucho regalar y que les regalen disfraces, es una cosa que no ocupa (¡muy importante!), sin pilas 😉 , que no pasa de moda y con lo que van a jugar muchísimo, y siempre.
En casa hemos tenido 3 disfraces estrella.
Uno de spiderman que fue creciendo con el segundo, siempre iba disfrazado de Spiderman. Fuéramos a donde fuéramos éramos la familia & Spiderman. De hecho, el tercero no lo pudo heredar porque el disfraz murió en combate…
El segundo disfraz fue uno de Mickey Mouse que no lo han disfrutado tanto porque el disfraz tenía un culo enoooorme y les resultaba un poco incómodo, pero era precioso, y ese sí que lo conservo.
Y el tercero uno de Super Mario, lo de pintarse el bigotillo (y eso que el mayor trae el bigote de serie…) les encanta.
Los tres disfraces los compré en su día en El Corte Inglés. Me gusta ir directamente allí porque tienen una gama muy amplia y el precio es mucho más inferior de lo que imaginaba antes de que me tocara comprar disfraces para niños. Es un poco ir a tiro hecho, encuentras de una sentada el disfraz, los leotardos que le hacen falta al disfraz, la camiseta interior por si necesita ir un poco más abrigado, las pinturas…
Por eso os confesaré que me encantó cuando El Corte Inglés nos invitó a pasar un día ‘disfrazados’… me encantó a mí, ¡¡y a ellos más claro!!
Quedamos el día 4 de enero, dos días antes de reyes. Nervios a flor de piel, pero… todo se olvidó al ver los disfraces. Sus caras eran un poema.
Al mayor le dieron un disfraz de pirata, nada más ponérselo ya ERAse un pirata a un catalejo pegado…
De hecho hasta hizo un mapa en un segundo (el pequeñajo está emocionado con la idea de encontrar el tesoro como veréis).
El segundo se convirtió en un auténtico caballero. ¿Puede quedar mejor ese disfraz?
Fue ponérselo y salirle una vena seductora… Emocionado con su espada y su escudo.
El tercero disfrutó como un enano, le había tocado de… ¡¡polisia!!! Madre mía el uso que le dio a las esposas….
Aquí le tenemos deteniendo a un pobre león que pasaba por ahí…
Y el chiquitajo… ¡mejor os lo enseño en el vídeo! Un fiero cocodrilo que después de jugar como un loco cayó agotado…
Los demás niños, ¡comestibles! ¿Qué me decís de esta mariquita?
¿De esta India, este Duendecillo arco iris o este León tan fiero??
Por no hablar de un Astronauta recién aterrizado en la tierra,
o de un caballero con cara de querer repartir justicia…
Y el disfraz estrella para todas las princesitas…
Nosotras nos lo pasamos como enanas… unas máscaras, un poco de confeti y ¡¡la fiesta está montada!! No hace falta un súper disfraz si no se quiere, con eso basta para ir a tono con ellos. Y lo que os decía, todo se puede encontrar en El Corte Inglés.
Por el frío no os preocupéis, son abrigaditos todos, y sino pues un buen leotardo o una camiseta interior. Además, con lo que se mueven no creo que pasen naaaaaaaada de frío. Os dejo con un vídeo para que veáis lo bien que se nos lo pasamos.
Un besito!
NGR
Tomo nota.
Por cierto, qué hijos más guapos!!!!
Muchas gracias!!!! un besazo