A propósito de Llewyn Davis es la última película de los hermanos Coen, esta vez sobre Llewyn Davis (interpretado por Oscar Isaac), un cantante de música folk (ficticio) que durante una semana recorre la escena musical del Greenwich Village de 1961 desde Nueva York hasta Chicago y vuelta. Maltratado por el frío invierno, sobrevive gracias a la generosidad de amigos y extraños –entre ellos el matrimonio formado por Justin Timberlake y Carey Mulligan–, con la esperanza de agradar al famoso productor musical Bud Grossman como única motivación. Se estrena en España el 1 de enero.
La música es original y la interpretan los propios actores gracias a la colaboración de productor musical T Bone Burnett, con quien los hermanos Coen ya han trabajado en cuatro ocasiones.
La gran diseñadora de vestuario Mary Zophres (colaboradora habitual de los hermanos Coen, y que también hizo Atrápame si puedes y Gangster Squad) ha sido la encargada de crear el look de principios de los sesenta para la película. Zophres tenía una cosa clara: no quería una copia de Mad Men, sino todo lo contrario. Ropa desgastada, un tono grisáceo para todo el guardarropa de los personajes… La paleta de colores está inspirada en la portada del disco Freewheelin de Bob Dylan que lanzó en 1963. El estilo de 1961 aún no había evolucionado a lo que hoy conocemos como el look típico de los años sesenta, pero lo que sí sucedía es que la formalidad de los cincuenta empezaba a deconstruirse: cuellos sin abotonar, camisas por fuera de las faldas y los pantalones, ya no usaban rulos para el pelo, las mujeres comenzaban a llevar pantalones… Si hay prendas clave en la película, son los jerseys de Carey Mulligan y la chaqueta de pana de Oscar Isaacs, que parece comprada de una tienda de segunda mano pero que fue confeccionada a medida inspirada en las chaquetas que encontró Zophres mientras investigaba la escena folk pre-Dylan. Incluso los zapatos están hechos a medida.
Imágenes: © 2012 Long Strange Trip LLC
