Es innegable que cuando pasamos una larga temporada cerca del mar, nuestro cuerpo y nuestra mente cambian gracias a esa especie de «efecto» sanador que difícilmente se puede explicar. El mar, aunque suene algo místico, tiene ciertos poderes que para algunos son imprescindibles en el día a día y por ello, no conciben vivir alejados de él. De esta manera, es un hecho bastante normal y corriente que a la hora de decidir un destino donde comprar una segunda vivienda, siempre tengamos el mar como primera opción, ¿verdad?
La suavidad del clima, la gastronomía, el sonido relajante, La paz que desprende… El mar es una fuente inagotable de beneficios y por ello, apostar por una vivienda ubicada en zona de costa es una inversión segura. Ya sea para tener un lugar al que escapar en la temporada de vacaciones familiares o para pasar felizmente tu futura jubilación, en CHG tenemos y te contamos todos los beneficios que tiene vivir cerca del mar. ¡Toma nota!
Índice
La mejora de la calidad del sueño
Al vivir cerca del mar, la tensión de nuestro cuerpo se estabiliza y de esta manera logra que nos relajemos. La principal manifestación de esta relajación, como uno de los objetivos más buscados de nuestro día a día, es que durmamos mucho mejor. La sensación de relax favorece a la calidad de nuestro sueño, haciendo que durmamos más profundamente y de forma más prolongada. Todo un «sueño», ¿verdad?
El mar, un motor de la felicidad
Uno de los aspectos más destacados y que más nos interesa de vivir cerca del mar es que, tal y como se ha demostrado, la brisa marina tiene el poder de equilibrar los niveles de serotonina. ¿Las consecuencias de ello? Básicamente, esto se traduce en que el mar es capaz de reducir la ansiedad y el estrés y por este motivo, las estadísticas afirman que las personas que viven cerca del mar tienen unos mayores niveles de felicidad.
Incita a la actividad física
El hecho de vivir cerca del mar es aliciente decisivo a la hora de animarse a salir al exterior y hacer ejercicio. No es lo mismo hacer running, ciclismo o yoga en mitad de la ciudad, que hacerlo a la orilla del mar. Disfrutar de su sonido, su paz y su tranquilidad motiva enormemente a hacer deporte y de este modo, el estilo de vida de la gente que vive cerca del mar es mucho más saludable.
La maravillosa calidad del aire
Tal y como han demostrado numerosos estudios, el aire de las zonas de mar es más limpio y está menos contaminado que en las zonas de interior. Esto se debe básicamente a que la brisa del mar es rica en yodo y sales marinas, por lo que hace que nuestra respiración mejore, fomentando incluso la descongestión nasal. Además, el yodo también mejora nuestro sistema inmunológico, haciendo que nos mantengamos más fuertes frente a la contracción de enfermedades o infecciones.