Pues sí, y nos damos con un cantito en los dientes porque hasta hace nada no existía y él la creó, estamos ante la mascarilla que faltaba… The London Mask de Twelve Beauty.
Su creador, Pedro Catala, licenciado en farmacia, cosmetólogo especializado en Botánica y en Ciencia y Tecnología de los Cosméticos se ha inspirado para su realización en los tradicionales métodos de los boticarios y sus fórmulas magistrales.
Siempre estuvo interesado en el uso de plantas medicinales aplicadas al cuidado de la piel, e investigó extractos de plantas para desarrollar y poner a punto durante cinco años su revolucionaria línea Twelve Beauty, nueve productos para el cuidado de la piel, pensados para su bienestar, mejorando su funcionalidad y manteniéndola más sana por más tiempo. Están especialmente indicados para tratar: Piel de textura sensible o delicada, fina, que tiende a ser seca; piel propensa al enrojecimiento debido a los cambios de temperatura (frío y calor extremo); piel expuesta a las inclemencias atmosféricas (viento, sol, frío, contaminación) y productos químicos (jabón, medicamentos); piel que sufre de estrés o cambios hormonales, incluyendo acné; piel predispuesta a reacciones alérgicas.
Sus fórmulas combinan 12 (TWELVE… ) principios activos de origen vegetal en su concentración óptima para lograr resultados eficaces y compatibles con la composición de la piel, y todos incluyen una mezcla especial de 4 potentes antioxidantes y nutrientes de origen biológico: artemisia, con propiedades antioxidantes y anti-radicales libres; imperatoria, hidratante y anti-oxidante; malva, con propiedades calmantes, anti-irritantes, emolientes e hidratantes; y buddleja, un potente anti-oxidante.
Y la mascarilla de la que hoy os hablo es The London Mask, un homenaje a la ciudad donde Pedro Catalá vive desde hace 15 años.

Vivir en Londres, significa vivir deprisa y con niveles de contaminación mayores de lo deseable, por lo que hay que tomarse el cuidado de la piel muy en serio. A esto le sumamos la necesidad de estar radiantes después de un largo día para no perdernos nada de lo que la ciudad ofrece…

Todo ello le llevó a querer crear un producto que ayudara a eliminar toxinas y reparar la piel de posibles daños debido a la contaminación atmosférica. Y que, al mismo tiempo, este remedio orgánico calmara y suavizara incluso la piel más estresada proporcionando una luminosidad única.
Esta mascarilla altamente hidratante está hecha a base de almidón de arroz biológico, caolín purificado, escualeno vegetal, malva orgánica y derivados de consuelda. Para su elaboración he rescatado un método tradicional inspirado en aquellos boticarios cuando mezclaban extractos botánicos con mucha paciencia a golpe de mortero.

Está indicada:
– Para el cuidado post cirugía.
– Para pieles estresadas y con falta de elasticidad e hidratación.
– Para aquellos que deseen una mayor luminosidad y mejorar el tono de su piel.
Importante: Como os decía al principio la complejidad de su fórmula limita la producción a 50 unidades al mes. ¿Te gustaría ser una de esas 50 afortunadas este mes?
Cuesta 120 euros aquí.
Un besito!!
NGR