¿A quién no le gusta hacerse un wok de verduras para comer o para cenar? Se trata de un plato que resulta súper gustoso de comer. Una vez que aprendas a prepararlo, ¡querrás comerlo todos los días! Además, se trata de un plato muy saludable, puesto que comemos verduras -y algunas veces también algo de carne según la receta- sin tomar prácticamente nada de aceite. Hemos preparado este post con los trucos fundamentales y los pasos a seguir par que tu wok de verduras sea un éxito. Si echas en falta algún consejo, ¡no dudes en contárnoslo en los comentarios!
Pasos para hacer un wok de verduras
Una de las claves principales para que nuestro wok esté delicioso es la forma de cortar las verduras. Por ello, te aconsejamos que pongas toda tu atención en esto, e intentes que te queden lo más finas y alargadas posibles, en forma de bastoncito. Cuanta más variedad de verduras, más explosión de sabores, pero las que no pueden faltar en el sofrito son: el pimiento rojo y verde, la zanahoria y la cebolla. Estas verduras le darán el toque especial a tu wok. También puedes añadirle algo de ajo o incluso calabacín o champiñones para que tu wok tenga un sabor más contundente. El ajo tienes que picarlo finito y en trocitos muy pequeños para que no mate el sabor del wok.
Otra de las claves está en la temperatura a la que pongamos el fuego. Lo que conseguimos con el wok es que las verduras no se pochen sino que se hagan por fuera y mantengan su carácter ligeramente crujiente. Para ello, tenemos que poner el fuego a intensidad fuerte y echar las verduras cuando ya esté bien caliente. También debemos remover las verduras todo el rato con una pala de madera, con la que no dañaremos nuestro wok y además impediremos que las verduras se quemen. No todas las verduras se echan a la vez; depende mucho del tiempo de cocinado de cada una de ellas. Empieza siempre con las zanahorias y el ajito picadito y ve añadiéndolas según el tiempo que necesiten estar en el fuego.
El toque final del wok está en la soja que debemos añadir a nuestras verduras al final. Acuérdate que la soja es un tipo de salsa salada, por lo que no debemos añadir sal a las verduras. Con un chorreón de soja tendremos suficiente para que nuestro plato esté lleno de sabor.
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